Nuevamente la realidad se subió a las tablas, para mostrarnos lo difícil y a veces absurda que se ha vuelto la vida moderna.
Así lo hizo la obra teatral "Vení, Vamos a Colear", escrita y dirigida por Jhonathan Camacaro de la agrupación Tejedores de Sueños. Una obra que narra un conjunto de anécdotas, situaciones comunes y la rutina en las colas frente a los supermercados de Venezuela, donde cientos de personas se concentran para comprar alimentos.
Desde los corruptos, los fanáticos políticos y religiosos, los dirigentes vecinales, militares, sifrinos, delincuentes, hombres, mujeres, ancianos, enfermos, mentirosos, en fin, todos dedicados al bachaqueo (contrabando de alimentos).
Todo ese mundo de seres tan reales como desvergonzados se encuentra en cada cola, desde el amanecer hasta que logran adquirir sus preciados productos a precios regulados que probablemente terminen vendiendo con sobreprecio para obtener una ganancia.
Esta obra recopila todos esos personajes, momentos y experiencias vividas en esas colas y llevadas a escena de una manera fresca y divertida, aprovechando un excelente recurso teatral: el juego. Asimismo encontramos bailes y canciones, todo cuidadosamente armado para que el público se ría de su triste realidad.
De esta obra destacamos el dominio del espacio escénico demostrado en cada transición de cola a juego, a baile y nuevamente a cola, sin interrumpir la obra. Evidentemente este trabajo requirió muchas horas de ensayos para lograr esos cambios de formación, armando y desarmando escenas, coreográficamente, sin descuidar la trama.
También debemos reconocer el bautizo como dramaturgo de Jhonathan Camacaro, de quien consideraremos esta obra como su ópera prima al ser autor y por primera vez, director de una pieza extensa y con una elenco numeroso.
Una prueba superada, aunque aun tiene mucho que dominar y superar, pero sin duda es un buen inicio.
"Vení, Vamos a Colear" es una del gran número de obras presentadas este año en Lagunillas, que se consolida como uno de los municipios con mayor producción teatral de Venezuela.También la agrupación Tejedores de Sueños es el colectivo con mayor número de actores, la mayor cantidad de obras en 2016 y con el trabajo de formación más constante de la Costa Oriental del Lago.
Esperamos que esa tendencia siga creciendo, que se siga innovando en los temas, que se siga mostrando la realidad de manera creativa y que las agrupaciones continúen formando actores para que en los años siguientes además de cantidad de obras también podamos hablar de calidad en el teatro.
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