Este año ha
sido altamente productivo para el sector cultural en el municipio Lagunillas.
Actividades como el Encuentro de Resistencia Cultural, el Cambalache Cultural,
la inauguración de una nueva Bodega Cultural y el Congreso de Teatro y Circo
son algunos de los ejemplos dignos de mención. Representan el esfuerzo y la
constancia de diversos colectivos que trabajan por la preservación de nuestros
valores y por el verdadero amor al arte (sin comillas).
Agrupaciones
de teatro, danzas, títeres, circo, música y literatura se han mantenido activos
en dos áreas fundamentales como son la formación de nuevos talentos y el
acercamiento del arte a las comunidades, que difícilmente tienen acceso a estas
valiosas herramientas para el crecimiento personal. Recursos muy útiles para
enfrentar flagelos como la delincuencia, la violencia o el consumo de drogas de
las que tanto nos quejamos.
Para seguir
enumerando, debemos reconocer la gran cantidad de talleres y cursos de danzas
folclóricas, teatro-clown, pantomima, malabares, dramaturgia, zancos, dibujo y
pintura dictados casi en simultáneo por decenas de artistas de la ciudad.
Además, nos favorece la apertura de espacios de creación literaria y proyección
cinematográfica, ambos en la Casa
de la Cultura
“Don Otilio Miquilena”.
Como si esto
fuera poco, en noviembre disfrutamos de teatro de calidad hecho en nuestro
municipio con las obras “De Nombre Nacha” del profesor Alberto Sandoval. En
diciembre nos complacerá recibir las piezas “Los Hablachentos” del grupo El
Zaguán; y “El Difunto Joaquín” del Movimiento Eleazar López Contreras. Así como
exposiciones de pintura, recitales poéticos y más arte desbordado en los
barrios.
Mención especial requiere el Segundo Encuentro de Historiadores, Cuenteros y Cuentistas de Lagunillas, quienes intercambiarán investigaciones, anecdotas y reflexiones sobre el trágico incendio de Lagunillas de Agua.
Pero aún
falta mucho por lograr. Se hace necesario derrotar el poco interés demostrado
por los gobernantes locales y regionales, vencer la muralla burocrática de
otros organismos y convencer a los medios de comunicación de que lo nuestro
tiene tanto valor como las propuestas caraqueñas (ésas que no nos identifican y
resultan costosas).
Más allá de
eso, es fundamental conseguir el apoyo del público cuyo interés despierta
lentamente y seguir reclutando jóvenes talentos que garanticen la continuidad
de nuestro arte, para darle a la cultura lagunillera (o paraujana) el lugar que
merece en la sociedad.
Luis Gerardo Leal
Periodista
@leallg
1 comentario:
Para q realmente mejore la cultura en Lagunillas es necesario q la alcaldia tome en serio la cultura. Pero los copeyanos no saben nada d eso.
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