Anotaciones sobre los indígenas Añú

Ciudad Ojeda, 02 de enero de 2016.-


Interpretando el relato del origen difundido por Ángel Luengo en 2005, al principio de los tiempos solo había agua. Ariyuu formó crecientes que traían  tierra acompañada con vientos fuertes, mucha lluvia, tempestad y relámpagos. Todo eso era para abonar la tierra y así se formó Warushar, la laguna donde vive el añú.

El añú nació del agua y vive en el agua. Sobre ella, el mundo conocido. Debajo de ella, en el fondo del agua, hay un mundo que se hundió, allá hay otros añú, que lloran cuando hay creciente. De ese mundo nacen los añú. El añu no muere, pasa de un mundo a otro. Del mismo lugar de donde nacen, regresan. 

Ariyuu creó en nuestra tierra a los niños, por allá unos muchachitos y aparecían en pareja y crecieron en los montes y se fueron fomentando, pero esos Añú estaban antes en el mundo. Hubo un momento que muchos niños y personas se convirtieron en carraos, en animales, muchos de los que se convirtieron en Carrao sabían pescar y sacar pescao con su pico, pero muchos carraos se convirtieron después en gente, en persona y eran unos buenos pescadores.

El añú se identifica con el agua, porque es parte de ella, de Warushar. Ambos, gente y mundo están conectados. El hombre como parte de la naturaleza. El cuerpo vive del agua, en el agua con la arena, el cuerpo es de agua y arena. Por eso dicen que el cuerpo es Warushar. Warushar está enferma, si Warushar muere, todos moriremos con ella.

Los añú vivieron en Marakaiwo, hoy Lago de Maracaibo. Esa era su nación, tal vez la única república acuática conocida en el mundo. Tenían diversas comunidades en los alrededores que se comunicaban a través de viajes en canoas. De esos pueblos aún sobrevive Santa Rosa de Agua en Maracaibo, aunque ese no debe ser su nombre original. 

Vivían en casas de madera y eneas, agrupadas en comunidades, sobre el lago, sostenidas con estacas o pilotes. Su principal fuente de vida era la pesca, aunque solían ir a tierra para recolectar frutas, vegetales y animales. La enea (typha) era la fibra más utilizada para todo tipo de tejidos, ropa y utensilios. 

En la actualidad hay 17.437 habitantes Añú según el censo del año 2001, la mayoría de ellos viven en la Laguna de Sinamaica, municipio Mara del estado Zulia. También hay registros de descendientes añú en las islas que conforman el municipio Almirante Padilla y en Maracaibo. 

El pueblo añú presenta un reto actual para que su idioma no desaparezca, aunque existen organizaciones culturales que están luchando por su preservación. 
La población palafítica de Lagunillas de Agua
 fue un pueblo descendiente de la comunidad de Paraute

Mención especial merece la comunidad Paraute, un pueblo de indígenas añú ubicado en el Lago de Maracaibo, en la costa de la actual Lagunillas. Este cacerío existió desde cientos de años antes de la llegada de los conquistadores españoles a América. 

Los habitantes de Paraute fueron prácticamente exterminados por los europeos, los sobrevivientes terminaron mezclándose con europeos, negros, criollos y demás (una forma de erradicación racial muy común en la época colonial), por lo que quienes en la actualidad luchan por reivindicar al pueblo paraute son convencidos descendientes de los añú paraute, aunque no posean sus rasgos físicos. 

Algunos caciques añú (cuyos nombres conocemos aunque necesitamos investigar más sobre ellos) son Nigale, Tonoligaste, Tomenguala, Mataguelo y Camiseto. 

Estas son anotaciones hechas a fin de organizar la información que se ha difundido sobre los indígenas añu. Pero forma parte de un proceso de investigación que apenas comienza. 

NOTAS DE INTERÉS



ENLACES EXTERNOS


Relato Añú sobre el origen de la vida

Ciudad Ojeda, 02 de enero de 2016.-

Ariyuu formó la laguna con creciente que traían y abonaban la tierra acompañada con vientos fuertes, mucha lluvia, tempestad y relámpagos. Todo eso era pa’ abonar la tierra y así se formó Warushar.

Nosotros los Añú nacimos así. Ariyuu formó en nuestra tierra a los niños, se decía por allá hay unos muchachitos y aparecían en pareja y crecieron en los montes y se fueron fomentando, pero esos Añú estaban antes en el mundo. Porque allá en el fondo hay otro mundo, de allí nacieron los Añú y en la laguna crecieron más. Hubo un momento que muchos niños y personas se convirtieron en carrao, en animales. Muchos de los que se convirtieron en carrao sabían pescar y sacar pescao con su pico, pero también muchos carraos se convirtieron después en gente, en personas y eran unos buenos pescadores.

Nosotros nacimos del agua. Nosotros estamos arriba, pero en el fondo hay gente, los Añú. En el fondo hay un mundo que se hundió y están allá abajo, por eso cuando hay una creciente fuerte se siente un ruido, ese es el llanto de los Añú que están allá en el fondo, en el otro mundo. Del mundo que se hundió nacen, retoñan los Añú…

Por el cuerpo de Warushar estamos aquí, si Warushar no nos hubiera dado cuerpo no estuviéramos aquí, nosotros estuviéramos perdidos, no estuviéramos en el mundo… El cuerpo vive del agua, yo vivo en el agua con la arena, el cuerpo es de agua y arena, de ella y de nosotros también. Por eso dicen que el cuerpo es Warushar… Warushar está enferma, si Warushar muere, nosotros
moriremos con ella”.

Informantes: Josefita Márquez (Añú) y Altagracia Delgado (Añú). Tomado del ensayo "La Cosmogonía Añú" de Ángel Luego, 2005.

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